Serra Gelada, uno de los lugares más singulares en cuanto a sierras litorales valencianas se refiere, se encuentra entre las bahías de Altea y Benidorm. Un ecosistema de increíble valor ecológico y ambiental, declarado Parque Natural Marítimo-Terrestre.
Abahana Villas - Parque Natural de Serra Gelada en Altea.
El Parque Natural de Serra Gelada junto con su entorno y sus fondos marinos, se encuentra dentro de la región de la Marina Baixa y es uno de los más especiales de la zona por tratarse del primer parque marítimo-terrestre de la Comunidad Valenciana.
La sierra cobra forma con un relieve muy escarpado sobre los municipios de Altea, Alfás del Pi y Benidorm dando lugar a enormes acantilados de 500 metros que miran al Mediterráneo, y albergando bosques con un gran valor ambiental.
Serra Gelada se extiende por los municipios de Altea, Alfàs del Pi y Benidorm, y alberga un ecosistema donde convergen el Mediterráneo y la montaña. Sus fondos marinos son un tesoro submarino, con praderas de posidonia oceánica que sirven de refugio para especies como sargos, delfines y otros peces de vivos colores.
Dentro de los municipios cercanos al parque, se encuentran un total de cinco puertos con servicios de alquiler desde los que poder acceder a su parte marina; y es que el Parque Natural de la Serra Gelada es especialmente marítimo.
Sus 4.920 hectáreas de mar poseen uno de los fondos más increíbles de nuestra costa mediterránea llenos de frondosos bancos de posidonia oceánica y diversas especies de peces como el sargo, delfines y otros de intenso color que encuentran los requisitos perfectos para progresar; lo que aúna el valor ecológico a una amplia oferta de actividades recreativas para familias o grupos de amigos.
Una de las maneras más fáciles para visitar la parte acuática del espacio natural es alquilando una embarcación y navegar a vela, con kayak o practicando el deporte estrella en la zona, el paddle surf , para después zambullirse con las gafas de bucear y observar la sorprendente vida bajo el mar.
Su parte terrestre también tiene puntos de gran belleza con senderos repletos de pinos y numerosas aves como el halcón peregrino, cormoranes y curiosas gaviotas de pico rojo.
Serra Gelada es una visita increíble y casi obligada si uno está de vacaciones en la Costa Blanca, mar y montaña se unen en el maravilloso municipio de Altea donde la aventura y la belleza envolvente de este paraje están garantizadas
Viñedos que crecen sin riego artificial, en suelos arenosos o calcáreos que generan vinos vibrantes. La humedad de la noche y las brisas del día protegen sus cepas en equilibrio. Una viticultura orgánica rodeada de almendros y olivos, un ecosistema vivo.
Tres castillos imprescindibles en la Costa Blanca La Costa Blanca no solo es sinónimo de playas y calas idílicas; también guarda entre sus colinas y ciudades una historia fascinante. Tres castillos destacan como joyas arquitectónicas y culturales: el Castillo de Santa Bárbara en Alicante, la Atalaya de Villena y el Castillo de Dénia. Cada uno pertenece a una ruta diferente y narra un capítulo único del pasado de la región.
Agost es mucho más que un pueblo de la Costa Blanca; es un rincón donde el arte y la tradición cobran vida. En sus calles, el sonido del torno alfarero y el olor del barro cocido cuentan historias de generaciones dedicadas a transformar la tierra en auténticas joyas artesanales. Aquí, el visitante no solo observa, sino que se sumerge en una experiencia única: desde admirar piezas de diseño contemporáneo hasta vivir la emoción de crear su propia obra en talleres guiados por maestros alfareros. Agost te invita a soñar, a conectar con lo esencial y a llevarte a casa un pedazo de su alma.
